It’s a warm day in July, and one classroom at Naas Elementary School in Boring is fluttering with activity. Students are making art, some of it related to butterflies, which they are learning about and raising during summer school.

“Every year I like to find one subject to focus on that kids at all different grade levels will like and be interested in,” said teacher Stephanie Romero. “This year we focused on the life cycle of butterflies, embedding that topic in all subject areas like science, math, art, reading and writing.”

It’s not just the butterfly study and the chance to make cool art that’s special about this summer school classroom – the students are special, too. All of the K-4 children Romero taught in this month-long program are part of migrant families who work in agriculture and are transitory.

For the past six years, Clackamas Education Service District has partnered with the Oregon Trail School District to offer an engaging summer school experience for migrant children. The school district arranges food service and provides classroom space at Naas, a convenient location for participating students. Clackamas ESD manages the funding and student eligibility process, and provides all of the instruction.

“Our federal funding for the program requires that we focus on reading and math, but we go well beyond that,” said Will Flores, Clackamas ESD migrant education program coordinator. “We’ve created a true enrichment program, infusing science/STEM activities, art and music into the curriculum. We’ve even had a teacher from Mexico support our summer school via an exchange program.”

The main focus of the program is to prepare students for the school year ahead.

“This year I taught students going into kindergarten through fourth grade,” said Romero. “I focus on helping them thrive individually, while also meeting classroom goals. Four weeks is a short period of time, but the progress they make is great to see.”

Clackamas ESD has been facilitating a migrant student program in our region for 20 years, and the collaboration with Oregon Trail program is one of the most vibrant. Every summer, three to four classrooms are filled with migrant youth. In July 2023, the Oregon Trail program served about 50 students grades K-8.

“We’re particularly grateful to Oregon Trail Superintendent Aaron Bayer,” said Flores. “From the beginning, he’s been one of the program’s biggest supporters. Whatever we’ve needed to make the program successful, he’s provided.”

“We believe in the power of this program and the immense educational opportunities it affords our students,” Oregon Trail School District Superintendent Aaron Bayer said. “We are confident that the students participating in this program will forge a legacy of excellence and arrive at the future they deserve.”

Clackamas ESD’s migrant partnerships include affiliations with social service providers and the Oregon Child Development Coalition, which serves migrant preschool children in the region.

“We go beyond academics for our migrant program,” said Flores. “We refer families to multiple social service supports. We’ve facilitated vaccination clinics, and even brought in a dental van to provide dental care.

“We’ve developed connections and trust with the families we serve. All our migrant staff are bilingual. Families know they can count on us if they need something.”

Despite the transitory nature of migrant work, there is a fair amount of location stability for families served by the Oregon Trail summer program, leading to many extra benefits.

“I love getting to see many of the same children every year,” Romero said. “Consistency helps in building relationships. It’s a fun four weeks for them. They work on social skills and build friendships, in addition to getting ready for the new school year.

“I love this program so much!”

Es un cálido día de julio y en un salón de clases de Naas Elementary School, en Boring, hay cientos de actividades. Los estudiantes hacen obras de arte, algunas de ellas relacionadas con las mariposas, sobre las que están aprendiendo y criando durante la escuela de verano.

“Cada año me gusta centrarme en un tema que les guste e interese a los niños de todos los grados”, afirma la maestra Stephanie Romero. “Este año nos hemos centrado en el ciclo vital de las mariposas, integrando ese tema en todas las asignaturas como ciencias, matemáticas, arte, lectura y escritura”.

Lo especial de este salón de clases de verano no es solo el estudio de las mariposas y la posibilidad de hacer arte; los estudiantes también son especiales. Todos los niños de kindergarten a 4.o grado a los que Romero enseñó en este programa de un mes de duración forman parte de familias migrantes que trabajan en la agricultura y están de paso.

Durante los últimos seis años, el Distrito de Servicios Educativos de Clackamas ha trabajado en conjunto con el Distrito Escolar de Oregon Trail para ofrecer una atractiva experiencia de escuela de verano a los niños migrantes. El distrito escolar organiza el servicio de comidas y proporciona espacio para los salones de clases en Naas, un lugar conveniente para los estudiantes que participan. El ESD de Clackamas maneja la financiación y el proceso de elegibilidad de los estudiantes y proporciona toda la instrucción.

“Nuestra financiación federal para el programa exige que nos centremos en la lectura y las matemáticas, pero hacemos mucho más que eso”, afirmó Will Flores, coordinador del programa de educación para migrantes del ESD de Clackamas. “Hemos creado un verdadero programa de enriquecimiento, incorporando actividades de ciencia/STEM, arte y música al plan de estudios. Incluso hemos tenido un profesor de México que ha apoyado a nuestra escuela de verano mediante un programa de intercambio”.

El objetivo principal del programa es preparar a los estudiantes para el próximo año escolar.

“Este año enseñé a estudiantes desde kindergarten hasta cuarto grado”, afirmó Romero. “Me centro en ayudarlos a prosperar de manera individual, y al mismo tiempo a completar los objetivos del salón de clases. Cuatro semanas es un período breve, pero es estupendo ver cómo progresan”.

El ESD de Clackamas lleva 20 años facilitando un programa para estudiantes migrantes en nuestra región, y la colaboración con el programa de Oregon Trail es una de las mejores. Cada verano, entre tres y cuatro salones de clases se llenan de jóvenes migrantes. En julio de 2023, el programa de Oregon Trail les prestó servicios a unos 50 estudiantes de kindergarten a 8.o grado.

“Estamos particularmente agradecidos con el superintendente de Oregon Trail, Aaron Bayer”, afirmó Flores. “Desde el principio, ha sido uno de los mayores defensores del programa. Nos ha proporcionado todo lo que necesitábamos para que el programa tuviera éxito”.

“Creemos en el poder de este programa y las inmensas oportunidades educativas que ofrece a nuestros estudiantes”, dijo el superintendente del distrito escolar de Oregon Trail, Aaron Bayer. “Estamos seguros de que los estudiantes que participan en este programa forjarán un legado de excelencia y llegarán al futuro que merecen”.

Las asociaciones de migrantes del ESD de Clackamas incluyen afiliaciones con proveedores de servicios sociales y la Coalición de Desarrollo Infantil de Oregon, que presta servicios a niños migrantes en edad preescolar de la región.

“En nuestro programa para migrantes no solo trabajamos en el ámbito académico”, afirmó Flores. “Remitimos a las familias a diversos servicios sociales de apoyo. Hemos facilitado clínicas de vacunación, e incluso hemos traído una unidad odontológica para proporcionar atención dental.

“Nos vinculamos y confiamos en las familias a las que prestamos servicios. Nuestro personal para migrantes es bilingüe. Las familias saben que pueden contar con nosotros si necesitan algo”.

A pesar de la naturaleza transitoria del trabajo para migrantes, las familias que reciben los servicios del programa de verano de Oregon Trail tienen bastante estabilidad en su lugar de residencia, lo que implica muchos beneficios adicionales.

“Me encanta ver a muchos de los mismos niños cada año”, afirmó Romero. “La constancia ayuda a establecer relaciones. Son cuatro semanas muy divertidas. Trabajan en competencias sociales y crean amistades, además de prepararse para el nuevo año escolar.

“Me encanta este programa”.